Aunque por el aspecto puede no parecerlo, (no debí alisar bien la superficie y la miel se fue más para los lados), está increíble! De verdad, buenísima! Además, sin horno, ni fuego, lo poco que calenté lo hice al microondas. Fácil y deliciosa. Yo os recomiendo probarla.
INGREDIENTES:
Base:
100 gr de galletas
80 gr de mantequilla
Crema de queso:
250 gr de queso crema
200 ml de nata líquida 35% materia grasa
200 gr de leche
100 gr de azúcar
100 gr de nueces
5-6 hojas de gelatina
Cobertura:
75 gr de miel
75 gr de agua
30 gr de mantequilla
1 cucharadita de canela
1 hoja de gelatina
Triturar las galletas y fundir la mantequilla. Mezclar y colocar en un molde desmontable, presionando bien con los dedos hasta formar una base compacta. Reservar en la nevera. Hidratar la gelatina en agua fría, picar las nueces. Montar la nata, y cuando esté casi montada añadir el azúcar y seguir batiendo hasta terminar de montarla. Añadir el queso crema y mezclar. Apartar la mitad de la leche y calentar en el microondas. Escurrir la gelatina y añadir dando vueltas hasta que se disuelvan. Añadir el resto de la leche y agregar al la crema de queso. Añadir las nueces y mezclar. Llevarlo en el bol donde lo hemos preparado al la nevera durante media hora que empiece al solidificar un poco. Pasado este tiempo, remover un poco con una espátula para repartir las nueces y volcar sobre la base de galletas. Alisar la superficie y reservar en la nevera por dos horas aproximadamente. Preparar la cobertura. Remojar la gelatina en agua fria. Poner en un bol la miel, el agua, la canela y la mantequilla. Llevar al microondas por unos 40 segundos, escurrir la gelatina y añadir dando vueltas hasta que se disuelva. Si veis que no se os disuelve bien calentar un poco más en el microondas. Dejar entibiar un poco. Repartir sobre la tarta poniendo el dorso de una cuchara debajo para romper un poco la caída.
REFERENCIA:
No recuerdo la fuente.
