Este es un bizcocho más bajo en calorías porque esta elaborado solo con claras de huevo. Tiene muy pocos ingredientes y es sencillo de hacer pero sobre todo hay q seguir los pasos q se dan porque sino no saldrá bien y bajará. Ante todo necesitamos un ingrediente especial, el cremor tártaro. Se usa en repostería sobre todo como estabilizante para claras. No se puede substituir por otro ingrediente y si no se tiene mejor no hacer la receta. Se puede encontrar en sitios especializados y creo q lo he visto también en el carrefour.
INGREDIENTES:
12 claras de huevo
125 gr de harina
275 gr de azúcar
1/2 cucharadita de cremor tártaro
2 cucharadas de ralladura de limón
1 cucharadita de esencia de vainilla
Precalentar el horno a 180 °. Tamizar la harina con la mitad del azúcar 3 veces. En un recipiente batir las claras junto con el cremor tártaro hasta que formen montículos suaves. Añadir el resto del azúcar tamizado y seguir batiendo hasta que estén espesas y brillantes.
Incorporar la ralladura de limón, la esencia de vainilla y la harina. Mezclar con mucho cuidado para q las claras no bajen. Volcar todo en un molde, esto es muy importante, SIN ENGRASAR, porque las claras necesitan pegarse a las paredes para poder subir. Usar un molde metálico y desmoldable, los de silicona evitan que la masa se pegue al molde y no nos sirven, ahora veréis porque. Cocer la masa en el horno por aproximadamente 30-40 minutos. Sacar el molde del horno y sobre una rejilla invertir el molde, o sea ponerlo boca abajo, por eso necesitamos que el bizcocho se pegue al molde, y dejarlo enfriar. Una vez frio despegar con un cuchillo de las paredes del molde y espolvorear de azúcar glas. O acompañado de unas natillas o cubierto con glasa.... yo ya lo probé, esponjoso y tierno.