Esponjosos, muy tiernos y deliciosos... es que no hay más que verles la pinta... Son fáciles de hacer y además es una receta en la que se necesitan pocos ingredientes. Con el calorcito subieron muy rápido, así que además salieron en tiempo récord. Me quedó nata de otra preparación y no la quería tirar, miré recetas, pero la mayoría eran rellenos de nata, y yo no buscaba eso. Vi una, la miré, y me gustó, cuando fui a buscarla otra vez no la encontré. Así que ha sido un poco de memoria y un poco como me apeteció, pero creo que más o menos. La doy como lo hice yo. Le puse limoncello, pero podéis usar leche, creo que es lo que llevaba la original.
INGREDIENTES :
400 gr de harina de fuerza
200 ml de nata
1 huevo
50 ml de limoncello
Ralladura de limón
50 gr da azúcar
12-15 gr de levadura fresca pellizco de sal
Huevo batido para pintar
Semillas de amapola
Poner en un bol la harina y deshacer la levadura con los dedos en ella. Añadir el azúcar y la Ralladura y mezclar un poco. Hacer un hueco en el centro y poner el huevo, la nata y el limoncello. Yo entibié un poco la nata. Comenzar a mezclar y añadimos la sal. Amasar durante 10 minutos aproximadamente, hasta que veáis que tenéis una masa elástica y que no se pegue. Cubrir y dejar reposar Hasta que doble su tamaño. Ahora en verano en una hora la tenemos lista. Volcar la masa en una superficie enharinada y dividir en 12 porciones. Hacer bolitas de masa y colocarlas en una fuente engrasada, dejando un poco de separación entre ellas para que tengan espacio para volver a levar. Cubrir y dejar reposar otros 20 minutos. Precalentar el horno a 180°, calor arriba y abajo. Pintar los bollos con huevo batido y espolvorear con las semillas de amapola, es prescindible, podéis poner lo que queráis, fideos de chocolate o de colores, azúcar, o simplemente nada. Meter al horno por 20 minutos o hasta que estén así de doraditos. ¡Super tiernos! ¡Que ricos!!😋